Acerca de mí:
Nací en una familia de muchos gatos, alrededor de 10. Mis hermanitos estaban muy enfermos y yo fui la única que resistió fuerte sin enfermarse, así que, con toda esperanza, mi dueña me alzó en brazos y no lloré. Recuerdo que llegué a lo que sería mi nueva casa y sentí que estaba en el paraíso; salvo por dos caniches, aunque luego se convirtieron en mis compañeros de juego.
Hoy por hoy, vivo feliz, coriendo por todos lados y comiendo un montón. Aunque, hace un tiempo, luchaba todas las noches contra un gato negro; agradecida de que no me vuelva a molestar, un día no volvió más.
Con mi dueña dormimos todas las noches juntas, y si no está, la busco maullando por todos lados.
¡Mi nombre es Mai!
Acerca de mi dueña:
Empezó a cocinar desde pequeña por impulso de la mamá de su amiga, la cual siempre le traía recetas para que se divirtiera haciéndolas.
En la pandemia floreció su pasión por la cocina; comenzó a experimentar recetas nuevas con el clásico fallo y error, así que, de esta forma, ayudaba a engordar a nuestra familia. Esto le abrió las puertas a crear su propio micro-emprendimiento vendiendo en la tienda de su tía.
Fue entonces que pudo hacerse un poco más independiente, gracias a la cocina.